A ellos no les generó mucho asombro lo que lograron, pero están seguros de que al resto sí. “Los sorprendimos”, aseguró Nicolás Bollero. Junto a su papá, Rodolfo, el navegante sabía que una actuación como la que tuvieron en la tercera edición de la South American Rally Race (SARR) era posible. Con el segundo puesto en la categoría T1.1 de la carrera que unió La Rioja con Viedma, en nueve días y luego de recorrer más de 4.000 kilómetros, los Bollero superaron todo lo que se les puso en el camino. Menos, claro está, a Juan Cruz y a Alejandro Yacopini. Los mendocinos, hijo y padre, piloto y acompañante respectivamente, fueron los ganadores en la divisional. “Nos tienen que ver con otros ojos ahora. Saben que somos un equipo llegador”, definió “Nico”. “A pesar de no tener tanto presupuesto, tantos sponsors grandes, ni tantos repuestos, pudimos llegarles con ritmo”, destacó el navegante, comparándose con la dupla que en el último Dakar terminó en el top-20.

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Papá Bollero tampoco dudaba del potencial que tenían para encarar el SARR. El título en el Campeonato Argentino de Navegación 2018 y los podios que lograron en las dos ediciones pasadas de la carrera -segundos en 2020 y terceros en 2021 en la T2- les daban razones para vislumbrar un buen rendimiento en 2022 en la categoría más competitiva de autos.

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Lo que sembraba incertidumbre era que al tercer desafío debían afrontarlo con un vehículo al que todavía no conocen con tanta profundidad. “No sabíamos bien qué esperar, porque era la primera vez que corríamos una prueba tan larga con esta camioneta”, explicó el piloto. La Chevrolet V6, que está con los Bollero desde septiembre, se comportó con fidelidad hacia la dupla. “Anduvo muy bien, pero las exigencias fueron extremas, por eso hubo muchas roturas que fuimos solucionando. Hicimos todo lo que estaba a nuestro alcance para hacer una buena carrera”, aseguró “Rodo”. “Estamos lejos de poder pelear contundentemente el 1 de la categoría”, insistió “Nico”. “Los que ganaron tienen mucha infraestructura, presupuesto y compiten a nivel mundial. Pero no es menos meritorio, ni para ellos ni para nosotros, el puesto que conseguimos”, analizó el navegante, que junto a su papá ya le apuntan al próximo SARR. Previamente habrá más kilómetros de competencia para seguir formando el equipo ideal junto a la camioneta.

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Final difícil

Andrés Reginato (atrás) y Emmanuel Guevara no pudieron completar la última de las nueve etapas. El UTV 219 de la categoría T3.1 quedó 10º.